MOLINO DE HARINA (1858)
En 1858, Don Raimundo Martín, vecino de Becerril de la Sierra, solicitó la cesión de una porción de terreno en la zona del Gamonal, con el fin de llevar a cabo la construcción de un molino harinero, que serviría para dar abastecimiento a los vecinos de Moralzarzal y sus alrededores. El emplazamiento va a estar determinado, con el fin de poder aprovechar las aguas del río de los Linares.
La concesión del pequeño pedazo de terreno, de utilidad pública, tuvo una contraprestación a favor del Municipio. Ésta se fijará en «dos cuartillos por fanegas, cualquiera que sea la especie de grano que concurran a moler como máximo de máquila1, con referencia a los moradores de este pueblo y quedando en plena libertad de fijar, la que estimara más conveniente, con respecto a los demás moradores».
Entre otras condiciones que se estipularon para llevar a cabo la cesión sería, que las aguas que vertiera el molino se debían dirigir a la cacera de los Linares y si no fuera posible que volvieran al punto de partida, debía construir otra cacera para recoger las aguas y conservarlas perpetuamente en buen estado.
Don Raimundo Martín Barrios, en 1887 sería asesinado en el camino de Moralzarzal hacia Becerril, como recuerda una cruz situada en el lugar de su muerte.
El posterior propietario, Don Ángel Sanz Sanz, en 1946 solicitó la concesión de un sobrante de terreno para construir un accesorio para el molino y llevar así a cabo la expansión de las faenas de molturación.
1Máquila: porción de grano, harina o aceite que corresponde al molinero por la molienda.